Federico I Barbarroja
Federico de Hohenstaufen
Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico (1152-1190), rey de Italia (1155-1190) y con el nombre de Federico III, duque de Suabia (1147-1152, 1167-1168)
Federico I nació en Waiblingen en 1123.
Hijo de Federico II de Hohenstaufen, duque de Suabia y sobrino del emperador Conrado III. Éste, desde su lecho de muerte, recomendó a los príncipes alemanes que eligiesen a Federico para la corona de Germania y para el trono imperial.
En 1152 fue proclamado rey de Germania y elegido emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.
Consideró que su título imperial era una concesión de Dios, otorgada mediante los príncipes germanos. Dio la orden de establecer la paz entre los príncipes de Germania, al tiempo que les garantizaba concesiones.
En 1154 marchó a Italia, donde recibió la corona del reino lombardo en la ciudad de Pavía. Al año siguiente fue coronado emperador del Sacro Imperio por el papa Adriano IV, cuya autoridad había sido restablecida por Federico con anterioridad a su coronación.
En 1156 se enfrentó al Papado a causa de una carta de Adriano IV, en la que éste apuntaba que el Emperador poseía sus territorios en calidad de feudo del papal.
Dos años más tarde, se enfrentó a los lombardos cuando pidió reconocimiento de todos sus derechos como rey en cada ciudad. Milán, Piacenza, Brescia y Cremona consideraron esa demanda como una negación de sus libertades comunales e iniciaron en 1158 una lucha que duró hasta 1183 y que le obligó a realizar cinco expediciones militares en Italia.
Entre tanto, nombró a una serie de antipapas en oposición al papa Alejandro III, que defendía la causa de la ciudad de Milán y sus aliados y que lo excomulgó en 1165. Tras atacar la Ciudad Leonina en Roma en el año 1167-1168, pudo instalar a uno de sus antipapas, Pascual III, en la Santa Sede. La Liga Lombarda, formada por las ciudades de Milán, Parma, Padua, Verona, Piacenza, Bolonia, Cremona, Mantua, Bérgamo y Brescia, quedó constituida en 1167 y reconoció al papa Alejandro III como su líder. Durante los siguientes siete años la Liga reconstruyó Milán, edificó la ciudad fortificada de Alessandría y organizó un sistema federal de administración.
La quinta campaña (1174-1176) terminó con su derrota en Legnano por parte de la Liga Lombarda. Se vio obligado en 1177 a reconocer al papa Alejandro III y a firmar en 1183 la Paz de Constanza, por la que tuvo que acceder a las demandas lombardas de autonomía aunque manteniendo la soberanía del Imperio sobre las ciudades.
Hizo de Polonia un estado tributario del Imperio, elevó Bohemia al rango de reino y convirtió el margraviato de Austria en un ducado independiente de carácter hereditario. En 1180, puso fin a la larga lucha contra los güelfos, tras sofocar una rebelión encabezada por Enrique el León, a quien privó de casi todas sus tierras.
Inició la tercera Cruzada en 1189. Al año siguiente, después de ceder el gobierno del Imperio a su hijo Enrique (Enrique VI), partió hacia Asia Menor.
Tras obtener dos victorias sobre los musulmanes en Filomelion (Aksehir) e Iconium (Konya), se ahogó el 10 de junio de 1190 en el río Kydnos (Tarsus Çayi) en Silifke, Turquía.
Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico
Reinado
1155-1190
Predecesor
Conrado III
Sucesor
Enrique VI
Dinastía
Hohenstaufen
